Monterrey, Nuevo León. Con la pérdida del juez de barrio, desde el último cuarto del siglo pasado, se perdió la capacidad de que la sociedad civil, en sus barrios y colonias, tuviera un mediador "natural", para resolver buena parte de los conflictos cotidianos entre vecinos o autoridades. El tejido social fue quebrándose en un proceso persistente, donde antes se integraba a vecinos, colonos y ciudadanos. El país se desgató y se fué perdiendo.
"Hoy, las técnicas de la Mediación en conflictos para todo tipo, son una alternativa para recuperar ese tejido social perdido, el cual nos da identidad para volver a reconstruir, desde nuestros barrios hasta el país entero, esa unidad aún se puede seguir llamando México", señaló el doctor José Guadalupe Steele Garza, presidente del Colegio de Mediadores de Nuevo León y coordinador de la Maestría en Métodos Alternos de Solución de Controversias de la Facultad de Derecho y Criminología de la UANL.
"El incremento de tanta violencia en nuestras poblaciones, es por que se acabaron esos personajes de todos conocido y respetados, que era el juez auxiliar, ahí se dirimían muy buena parte de los conflictos, había palabra de las partes y voluntad para tener ese mediador tradicional que era el juez auxiliar", señaló el doctor Steele Garza.
"A la llegada de los años ochenta, representantes impuestos por los partidos políticos, usurparon esos puestos de mediación vecinal, utilizándose como trincheras del PRI y se les usó exclusivamente para la lucha electoral, dejando a la sociedad desnuda, posteriormente el influjo del narco acabó con todo ese filtro de conflictos vecinales que teníamos; por lo tanto, creció la Ley de la Selva y los conflictos que hoy tenemos son brutales, en cuanto a la convivencia de las familias en barrios, colonias y ciudad".
"No hay mediación alguna, sólo queda la intervención represiva de los cuerpos policiacos para alguna de las partes o la ausencia de los mismos y como último recurso, los burocráticos y tardados procedimientos judiciales que sólo ha conducido al incremento de fricciones y agresiones entre parejas, familias y sectores de población, resultando en los ya conocidos casos extremos de la nota roja de los medios de comunicación. Todo en sí ha generado un clima insoportable de vida para todos, que obviamente, sólo ha ido conduciendo a la pérdida del Estado de Derecho y la pérdida de la esperanza de una mejor sociedad y país", aseguró el especialista en Métodos Alternos para la Solución de Controversias.
Con una experiencia en el tema de 25 años y unos ocho libros, el Mtro. Steele Garza comentó que poco a poco, el uso de métodos alternos a la demanda judicial, al juicio, para resolver un conflicto entre particulares, empresas o instituciones, es un proceso que va al alza, ya se cuenta con centros de mediación en los municipios conurbados del área metropolitano de Monterrey, pues el tema es materia de estudio en la formación de los futuros abogados en la facultad de Derecho de la UANL, desde el segundo semestre.
"También, hay una maestría al respecto y se cuenta con una Ley en el Estado de Nuevo León, para la aplicación de tales métodos y la Procuraduría de Justicia el Estado los promueve y son una herramienta vital para el tratamiento de muy diversos casos y constantemente viajamos a otros estados de la República y el extranjero, a intercambiar nuestras experiencias, pero, aún falta mucho en toda esta nueva alternativa en la solución de conflictos".
Sin embargo, reconoce que la poca difusión que se ha dado en los MASC demanda su fomento con urgencia para poder así llegar a una amplia cultura de la mediación; es decir, llegar a recuperar el espacio perdido del juez auxiliar, llegar nuevamente a "armonizar las relaciones, sobre todo donde se dan más, que son las relaciones vecinales, aunque la mediación va más allá en las relaciones civiles, es tan grande el ámbito de la aplicación de la mediación que, de alguna forma, en donde hay conflicto, ahí puede entrar la mediación…"
"El día en que la gente conozca realmente los beneficios y las ventajas de este mecanismo en la solución de conflictos, la sociedad misma va a empezar a tomar conciencia de su responsabilidad y poder resolver sus conflictos", vaticinó el doctor Steele Garza.
"Hace falta voluntad política para reconstruir nuevamente la figura de los jueces auxiliares, que las autoridades tomen conciencia de que hay un problema y que hay que buscar soluciones": Insistió.
"Ya no podemos tapar el sol con un dedo, necesitamos acciones reales que nos lleven a la reconstrucción de la confianza en los barrios, el Colegio de Mediadores puede intervenir en ello, podemos capacitar persona para ser mediadores, sin ningún problema y sin ningún costo. El Colegio de Mediadores de Nuevo León, está dispuesto a hacer la reconstrucción de ese personaje que era el juez de barrio, el jefe de manzana, porque ello, realmente es política pública…" concluyó.
Raul Rubio. El Regio.com. 13/3/2011
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