El punto de vista Mediador…
Chano, Chon, Zacarías y el Divorcio
Jesús Elizondo González
“¡Dios de mi vida!” Es una expresión coloquial, muy familiar, que se utiliza comúnmente en el Norte de México, cuando se desea enfatizar un hecho generalmente exagerado o sobresaliente; confieso apreciable lector, que esa fue la frase que desde mi subconsciente, me saltó a la mente, ---aunque me abstuve de exteriorizar--- cuando llegué al restaurante.
Permítame compartirle, apreciable lector, una historia real que hace solo unos días me sucedió: *Chano, Chon y Zacarías, (*3 nombres ficticios para protegerlos) quienes rondan los 65 años de edad, son tres fieles y muy queridos amigos entre sí, quienes me invitaron a sentarme en su mesa, mientras abordaban un asunto muy delicado.
El tema que los mantenía concentrados, era el segundo divorcio de Zacarías: el qué negociar y el cómo debía realizar las negociaciones con su cónyuge.
Chano y Chon, fieles a la antigua amistad hacia Zacarías, y con la sincera intención de ayudar, le estaban dando una serie de sesudos consejos. Puse, entonces toda mi atención en la calidad de éstas recomendaciones, intentando hacer un rápido y acertado diagnóstico de la situación.
Al analizar con las técnicas Mediadoras contenidas en La Escucha Activa, el desfile de las recomendaciones que de buena fe le daban este par de buenos amigos a Zacarías, pude constatar como formaban coaliciones entre los tres, sin tomar en cuenta las verdaderas necesidades de los contendientes; mientras recogía la información emanada de los tres y la organizaba, pude constatar en ellos tres, la presencia de percepciones sesgadas, la aparición de emociones hostiles, las comunicaciones poco claras, las generalizaciones, eliminaciones y ocultamientos de información y otros vicios de la comunicación. “Caray, ---me dije--- qué difícil que es dar un buen consejo, y en especial, cuando no te lo piden.”
Observé que, con la mejor de las intenciones, Chano y Chon le señalaban a Zacarías, desde sus propios marcos de referencia, lo que ellos harían en circunstancias similares, según sus autobiografías. Ambos se referían solo a las posturas que Zacarías debería de adoptar al negociar, sin fijarse ni investigar los intereses subyacentes que sostienen las posturas. No se detenían a comprender a su lastimado amigo los porqués de esas posturas, a tal grado, que hicieron sentir a Zacarías presionado, o quizás, acosado con sus intentos manipuladores.
El momento de mi participación se presentó cuando Zacarías me preguntó con una entonación de preocupación en su voz y en su rostro, sobre cuál era mi punto de vista concerniente a los consejos que le estaban dado sus dos queridos amigos; en especial sobre la orientación de que cuando la pareja no es capaz de llegar solos, entre ellos mismos a un acuerdo, sólo existen dos caminos a tomar: “O le pides a tu abogado que sea él quien lleve las negociaciones o le solicitas a un amigo que negocie por ti.”
Después de legitimar la buena intención y el deseo de provocar el bien a Zacarías de parte de sus dos amigos, le pregunté cuáles eran sus metas que él deseaba alcanzar en la negociación para lograr su segundo divorcio. Al observar que Zacarías batallaba en encontrar su respuesta, le anticipé: "¿Prefieres un escenario en el que ella, a toda costa, no gane, aunque los dos pierdan? ó ¿Pretendes derrotar a toda costa a tu pareja, para sentirte ganador? ó ¿Te inclinas en obtener ventajas indebidas en ese acuerdo? Ó quizás ¿Deseas alcanzar un trato justo en el que los dos ganen?"
Casi de inmediato, Zacarías regresando el tono de brillantez en su cara contestó: “Eso último, lo que en realidad deseo es vivir en Paz, en compañía de mis hijos de mi primer matrimonio y sin tener enemigos, al menos evidentes.”
Bueno Zacarías, entonces te tengo muy buenas noticias. Existe una tercera alternativa: La Mediación profesional.
Casi con asombro, Zacarías de inmediato preguntó: "¿La Mediación profesional, y eso cómo funciona?"
“Cuando se requiere la intervención de un tercero y se desea lograr un resultado sensato, prudente, justo ---le expliqué--- en donde se busca que las dos partes ganen, el método más efectivo es el de llamar a un Mediador, quien es Neutral, Imparcial, Confidente y no expresa el Juicio, en el sentido de que no debe decir quien, según su criterio, tiene la razón ni quien es el equivocado; El Mediador, Zacarías, con técnicas especializadas en Mediación, les facilitará a las Partes que encuentren por sí mismas, las bases del acuerdo en esa delicada e importante negociación. Los conduce a un Ganar-Ganar y eso, es lo que realmente quieres.”
“Si contratas a un abogado para que negocie por ti, los términos del convenio, lo más frecuente que sucede en estos casos, es que la otra Parte haga lo mismo. Entonces, tenemos a un par de buenos abogados, tomando el control del asunto, buscando derrotar en los Tribunales a su rival; generalmente eso conduce a que las dos Partes pierdan. Y eso, no es lo que tú quieres. Mientras que, si contratas a un Negociador, éste se abocará comúnmente a defender sólo tus posturas, sobre las posturas de tu actual pareja. Con frecuencia, una posición negociadora sobre posturas, obscurece lo que tu realmente quieres. Este camino, por lo general conduce a obtener ventajas indebidas y lograr que una Parte gane y la otra pierda. Tampoco es lo que tu deseas”
Chano, con cara de sorpresa, y abriendo sus ojos un poco de más, advirtió: “Es la primera vez que sé de la existencia de éste nuevo personaje: “El Mediador” ¡y me parece una idea genial!” concluyó, mientras asentía varias veces con su cabeza. Zacarías y Chon se miraron mutuamente, y sonrieron en señal de aprobación.
A veces, causa admiración que existan grandes segmentos en la población de gente universitaria, acaudalada, muy exitosa para negociar en sus empresas, mientras que exhiben una falta de pericia para negociar cuestiones familiares, y viceversa. Además que esta misma gente importante, todavía desconoce la existencia de Mediadores profesionales.
Jesús Elizondo González. Presidente fundador del Centro de Mediación Privado, S.A. de C.V; Maestro en Alta Dirección de Empresas del IPADE; LAE del ITESM; Mediador Certificado por el Poder Judicial en el estado de Nuevo León; Capacitado en Mediación profesional en Buenos Aires, Argentina, Cd. de México, D.F., Sacramento, California, Minneapolis, Minnesota, Certificación en Soluciones de Alto Rendimiento al Conflicto, en el EGADE; Catedrático de la Universidad Regiomontana en la materia: “Negociación”; Conferencista en materia de Mediación profesional y Negociación. Ex Presidente del Colegio de Mediadores de Nuevo León, A.C. (2007-2011). Mediador privado profesional desde 2002. http://centrodemediacionprivado.blogspot.com/ , centro.de.mediacion@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario