Líderes en Mediación
La
mediación intrajudicial es una fórmula de resolución de conflictos que, aunque
se desarrolla dentro del sistema judicial, evita realizar un proceso completo,
es más rápida que un juicio y libera recursos de la Administración.
En el País
Vasco se ha interiorizado que la mediación tiene multitud de ventajas respecto
a los juicios y que alcanzar un acuerdo que satisfaga a las partes enfrentadas
en un pleito es más gratificante que asistir a la aplicación de un código de
Justicia. Quizás por ese conocimiento y convencimiento de las virtudes de la
mediación y por los buenos resultados obtenidos en los últimos años, Euskadi es
la comunidad líder en casos de mediación intrajudicial. El 60% de todos los
litigios que los órganos judiciales del Estado español derivan a procesos de
mediación se producen en la Comunidad Autónoma Vasca. Una prevalencia que se
basa fundamentalmente en el apoyo que los profesionales de la Justicia y el
Derecho prestan a esta forma de resolución de conflictos y en la existencia,
desde enero de 2011, de un Servicio de Mediación Intrajudicial que depende del
Departamento de Administración Pública y Justicia del Gobierno Vasco.
La rapidez
en la resolución de los pleitos y los buenos resultados obtenidos en los procesos
de mediación son los factores principales que impulsan el recurso creciente a
esta metodología. El Gobierno Vasco fue pionero en el Estado español en la
implantación de los servicios de mediación en los tribunales, estableciendo los
primeros servicios en 2007. Desde entonces la mediación judicial ha crecido de
manera prácticamente constante, hasta el punto de que el País Vasco se ha
colocado a la cabeza del Estado español en número de conflictos judiciales
derivados hacia los mediadores para su resolución sin necesidad de juicio. La
posibilidad de recurrir a la mediación una vez que un caso ha entrado en el
sistema judicial se ciñe en la actualidad al ámbito penal, tanto de personas
adultas como de menores de edad, y a los asuntos de familia: separaciones,
divorcios, custodias, conflictos con hijos e hijas a cargo, incumplimiento de
obligaciones familiares, etc. En el ámbito de los conflictos familiares, el
País Vasco cuenta también con un servicio de mediación extrajudicial, que en
muchos casos evita que los afectados lleguen a los tribunales.
El Gobierno
Vasco considera que la mediación intrajudicial es una fórmula útil y eficaz
para racionalizar el uso de recursos públicos y destaca que este sistema
acarrea un coste económico menor que afrontar un proceso judicial completo. En
este sentido, los profesionales que trabajan en este campo señalan que, aunque
la mediación permite liberar recursos de la Administración de Justicia en unos
tiempos en los que los órganos judiciales están saturados, la principal virtud
de este método de resolución de conflictos consiste en que “se humaniza” el
proceso. Estos expertos resaltan que todas las partes del conflicto, pero en
especial las víctimas, perciben que son escuchadas, que adquieren un papel
protagonista y que no son meros denunciantes. “La parte humana de la mediación”
es el aspecto más valorado, tanto por quienes buscan el acuerdo como por las
partes enfrentadas.
El año
pasado hubo 889 casos cerrados mediante la fórmula de la mediación, de los que
el 78% -688 casos- fueron con acuerdo entre las partes. El porcentaje de casos
cerrados con acuerdo en el ámbito de la Justicia juvenil sube al 84%, mientras
que en los conflictos familiares el pacto es más difícil y los acuerdos sólo se
alcanzan en el 52,8% de los casos. En los 201 pleitos -el 22% del total- en que
no fue posible alcanzar un acuerdo satisfactorio para todos el motivo principal
fue que las partes no movieron sus posiciones iniciales para acercarse a un
punto común o que alguna de las partes decidió dejar la mediación.
Más casos en Bizkaia. El 64% de los casos cerrados en 2014 se registraron en Bizkaia, lo
que supone que 569 litigios eludieron los tribunales. En 436 de ellos -el 77%-
se alcanzó un acuerdo y en 133 -el 23%- no fue posible. En Gipuzkoa hubo 167
casos cerrados -el 18,7% del total- y en Araba, 153 -el 17,3%-. De los 889
casos cerrados, 263 corresponden al ámbito de la Justicia juvenil y de ellos el
53,2% -140 casos- se registró en los partidos judiciales de Bizkaia, el 24,3%
en los de Gipuzkoa y el 22,4% en los de Araba. Una gran mayoría de los casos de
menores en los que actuó el Servicio de Mediación Intrajudicial estaban
protagonizados por chicos -el 77,9%-, mientras que a las chicas les
correspondieron 58 casos -el 22%-.
El proceso
de mediación se pone en marcha cuando, tras la presentación en un juzgado de
una denuncia (penal o de derecho familiar), el órgano judicial correspondiente
considera que es un caso susceptible de ser resuelto mediante la mediación y
deriva el asunto. Antes de llegar al Servicio de Mediación los casos pasan por
la Fiscalía. A partir de ahí se aplica el protocolo y se dan los pasos previos
de informar a las partes para que consientan en someterse a la mediación. Los
jueces vascos, a quienes corresponde derivar los casos, demuestran una gran
confianza en el sistema y año a año remiten más pleitos al Servicio de
Mediación, que ha multiplicado su actividad.
Entre los
casos derivados a la mediación priman las faltas frente a los delitos, que en
Bizkaia, por ejemplo, representan el 20% de todos los asuntos tramitados el año
pasado. Los expertos en mediación confían en que con el tiempo y la extensión
del servicio los delitos vayan ganando peso en los procesos de búsqueda de
acuerdos. Las faltas que se llevan más habitualmente a mediación son aquellas
en las que existe una vinculación emocional o de relación entre las partes,
entre víctima y victimario. Así es normal buscar acuerdos entre personas que
han sido pareja y entre vecinos, por ejemplo, mientras que las acciones que les
llevan ante el mediador suelen ser injurias, amenazas o coacciones. Entre los
delitos abundan los de lesiones, seguidos por los daños. La mediación está
vetada en temas de violencia de género.
La rapidez
en la resolución es otra de la ventajas de la mediación. Según la información
del Departamento de Justicia del Gobierno Vasco, el 80,8% de los casos se
cierran en menos de dos meses -desde el inicio del proceso de mediación hasta
su conclusión-, el 11,6% entre dos y tres meses, el 6,7% entre tres y seis
meses y apenas un 0,06% se alarga más de seis meses y menos de un año. Apuntan
estas fuentes que cuando la mediación se demora en el tiempo se debe a
dificultades de localización o a que alguno de los implicados reside en el
extranjero. La resolución rápida de los conflictos derivados a la mediación
frente a los que hacen todo el recorrido judicial es aún más evidente en el
ámbito familiar: el 19,2% de los casos tratados el año pasado se resolvió en
menos de 15 días, el 26,2% entre 15 y 30 días, el 31,5% entre 1 y 2 meses, el
12,7% entre 2 y 3 meses, y sólo el 10,2% supera los tres meses.
Las cifras de 2014
Casos. En
2014 hubo 889 casos cerrados por la fórmula de mediación y 688 (el 78%) de
ellos fueron con acuerdo entre las partes.
Territorios.
Del total de casos cerrados, 569 (64%) se dieron en Bizkaia, 167 (18,7%) en
Gipuzkoa y 152 (17,3%) en Araba. En Bizkaia el 77% de los asuntos se cerró con
acuerdo, en Araba el 80% y en Gipuzkoa el 78%.
Menores. En
2014 hubo 263 casos del ámbito de la Justicia juvenil cerrados con mediación y
en el 84% se alcanzó acuerdo. El mayor número de casos cerrados se produjo en
Bizkaia, el 53,2% (140 casos). En Araba hubo 59 casos y en Gipuzkoa 64.
Familias.
En la mediación en el ámbito familiar se cerraron 244 casos, de los que el
52,8% fueron con acuerdo. En Bizkaia se cerraron 170 casos (el 69,6%), y en 93
(54,7%) se logró un acuerdo. En Gipuzkoa hubo 55 casos (el 22,5%) y 24 con
acuerdo, y en Araba, 19 casos y 12 con acuerdo.
Beatriz Sotillo. Noticiasdelava.com Euskadi, España. 20/04/15